Estrategia de contenidos: Guía paso a paso para alcanzar tus objetivos

Hoy en día, la mayoría de las empresas han asumido que, para crecer y adaptarse a las nuevas tendencias de consumo, es fundamental estar en internet. Y crear contenido se ha convertido en una de las estrategias más recurrentes.

Sin embargo, a pesar de que, efectivamente, estamos hablando de una actividad que requiere de un alto valor estratégico para obtener resultados, muchas aún lo ignoran y crean contenido sin un plan que las lleve a cumplir con unos objetivos concretos… Y es aquí donde veremos cómo crear contenido va mucho más allá de subir artículos a un blog o abrir un canal de YouTube.

Una buena estrategia de contenidos, parte de un análisis de situación y pasa por diferentes etapas hasta concluir con la medición de resultados. Solo así podrás alcanzar los objetivos que os hayáis propuesto en tu negocio.

A continuación, analizaremos cada una de ellas y explicaremos qué acciones se deben desarrollar.

¿Qué es una estrategia de contenidos y para qué sirve?

Como ya decíamos en la introducción, una estrategia de contenidos es un conjunto de acciones que van encaminadas a la planificación, desarrollo, gestión,  distribución y medición de resultados del contenido que se crea bajo el nombre de una marca.

Desde hace ya algún tiempo, se ha convertido en una pieza clave en los planes de marketing. Y las empresas que la han implementado lo han hecho movidas por dos objetivos fundamentales:

• Educar a la audiencia. Una estrategia de marketing de contenidos internacional o nacional, muestra al consumidor cómo puede resolver cualquier necesidad o problema que tenga en ese momento. Informa sobre las opciones disponibles, pero también explica cuál es el mejor camino a seguir y de qué modo.

• Ganar reputación y confianza. Por otro lado, compartir contenido de alto valor conduce a una mejor reputación e imagen de marca. Lo que se traduce en una mayor confianza del consumidor. Es decir, optarán por los productos o servicios de marca que les inspira confianza, antes que por otra que no conocen.

Además de lo anterior, a la hora de comentar qué es la estrategia de contenidos es importante resaltar su componente orgánico. Es decir, a diferencia de la publicidad pagada, los resultados obtenidos por esta vía son naturales y sostenibles en el tiempo.

Tipos de estrategias de contenidos

Ahora bien, si profundizamos un poco más sobre este concepto, podemos distinguir entre diferentes tipos de estrategias de contenidos. De hecho, es posible plantear varias clasificaciones. Por ejemplo, en función de:

• La naturaleza del contenido.
• El canal por el cual se distribuye.
• Los objetivos a perseguir.

Según la naturaleza del contenido, podemos hablar de:

• Vídeo. El vídeo es un formato muy popular actualmente. Es uno de los más consumidos. Crear contenidos a partir de él puede ser útil si tu público se encuentra, por ejemplo, en YouTube.

• Blog post. Se trata del formato más tradicional. Actualmente es uno de los que Google más valora, junto con el vídeo, en su ranking.

• Podcast. De un tiempo a esta parte, dada su practicidad, el podcast ha ganado terreno de forma considerable. Se trata de un formato de audio que el público puede consumir de forma fácil.

• Imagen. Por último, para aquellas marcas que necesitan de un apoyo más visual, también es posible crear contenido a partir de imagen. Ya sea en forma de infografía o de fotografía de producto.

En función del canal por el que se distribuya el contenido, es posible destacar:

• SEO. Hablamos del posicionamiento en buscadores con el uso de herramientas SEO profesionales. Como decíamos antes, a través del blog post y del vídeo en YouTube es posible conseguir un buen ranking en Google.

• Redes Sociales. Si eres selectivo, esta estrategia puede dar buenos resultados. Se trata de compartir contenido en aquella red social donde se encuentre tu público y, a la vez, sea acorde a tu empresa.

• Email Marketing. Otro canal para compartir contenido es el email marketing. Para ello, deberás tener una base de suscriptores fieles. A través del email puedes compartir contenido de cualquier tipo.

• Grupos privados. Por otro lado, si buscas fidelizar a clientes o algún otro objetivo más específico, puedes sumarte a grupos privados o crear los tuyos propios para compartir tu contenido. Este debe ser exclusivo, de otro modo no tendría valor.

Y por último, dependiendo de los objetivos cabe hablar de tipos de estrategias de contenidos como:

• Descubrimiento. Aquí hablamos de crear contenido según cada una de las fases del embudo de marketing. La primera fase es el descubrimiento y sirve para atraer nuevos posibles clientes a tu marca. El contenido por excelencia en este tipo de estrategia son tutoriales, guías y otros de carácter informativo.

• Interés. La segunda va un paso más allá y busca captar la atención de esas personas y a ser posible algo más. Una estrategia de contenidos de interés debe basarse en aportar valor respondiendo a una necesidad muy específica, por ejemplo, a través de ebooks donde se desarrolle un tema en profundidad.

• Consideración. A continuación, durante esta etapa, el objetivo será profundizar en la relación establecida para conseguir que finalmente acabe en venta. En este sentido se pueden crear contenidos basados en casos de éxito.

• Venta. Por último, si decides elaborar una estrategia de contenidos enfocada a la venta, lo más acertado es enfocarse en facilitar la transacción a través de descuentos u ofertas. Estos pueden transformarse en contenidos de interés y difundirlos correctamente.

Ahora que conoces diferentes tipos de estrategias de contenidos, cabe resaltar que la más efectiva es aquella que combina diferentes formatos y canales, así como oportunidades del mercado en cada una de las fases del embudo. Al fin y al cabo, la estrategia debe ser un traje hecho a medida.

¿Cómo crear una estrategia de contenidos efectiva?

Ahora sí, es el momento de describir cada una de las etapas que intervienen en la creación de una estrategia de contenidos. Son un total de cinco:

1. Análisis
2. Objetivos
3. Planificación
4. Acción
5. Medición

El orden de las mismas es fundamental. Y como tal, te recomiendo no saltarte ninguna de ellas, si quieres diseñar un plan que realmente ofrezca garantía de resultados.

1) Análisis: Oportunidades, keywords y buyer persona

Para que una estrategia de contenidos y marketing digital dé resultados favorables, debe estar sustentada en una fuerte base de análisis.

Antes de comenzar es fundamental conocer cómo está el sector, qué oportunidades presenta, qué necesita nuestro público objetivo, qué preguntas se hace y qué alternativas existen para darles respuesta de forma efectiva.

Describamos cada una de las partes de este análisis:

• Oportunidades. A la hora de crear una estrategia de contenidos en redes sociales, de SEO o de cualquier otra naturaleza, de manera previa es esencial observar qué está sucediendo alrededor. Por ejemplo, qué está haciendo la competencia, qué tendencias existen en el mercado, de qué están hablando los consumidores, cuál es el momento social y político del momento, cuál es tu posicionamiento como empresa actual o qué huecos hay y tú podrías ocupar.

• Buyer persona. Seguidamente, deberás analizar a tu buyer persona. En este sentido cabe distinguir entre aspectos demográficos y sociales y aspectos emocionales. Ambos son igualmente importantes. Entre los primeros es interesante conocer edad, gustos o aficiones. Entre los segundos es vital centrarse en obtener la máxima información sobre sus necesidades, preocupaciones, frustraciones y deseos.

• Keywords. Como último punto de análisis, es el turno de estudiar las palabras clave que mejor encajan con la oportunidad actual y las necesidades de tu buyer persona. Este proceso es algo más complejo que los anteriores, pues requiere del manejo de herramientas específicas y un exhaustivo trabajo de interpretación. Aún así, existen aplicaciones gratuitas muy sencillas que igualmente se pueden usar para hacer un estudio básico de palabras clave.

Estos tres tipos de análisis serán los pilares que sustenten toda la estrategia de contenidos que vamos a continuar construyendo.

2) Objetivos: Estrategia de contenidos enfocada

El siguiente punto a abordar es la definición de objetivos. Es decir, el para qué se van a crear cada una de las piezas que forman parte del plan e incluso el plan en sí.

Para orientar la estrategia en la dirección adecuada es preciso tener claro los objetivos que se persiguen. Los objetivos de una estrategia de contenidos pueden ser muy variados e incluso se pueden combinar. Aquí te dejo algunos ejemplos:

• Expandir el mercado.
• Dar a conocer nuevos productos o servicios.
• Aumentar las ventas.
• Potenciar el reconocimiento de marca.
• Fortalecer la comunidad.
• Fidelizar clientes.
• Incrementar el tráfico hacia el sitio web.

Dicho esto, continuemos explicando cómo crear una estrategia de contenidos.

3) Planificación: Plan de contenidos y canales de difusión

Una vez que tenemos la información clara y sabemos hacia dónde queremos ir, hay que establecer el plan que nos lleve hasta allí. Para ello, es fundamental diseñar una hoja de ruta que especifique dónde, cuándo y cómo se va a publicar cada pieza de contenido.

• Dónde. Este punto hace referencia al canal de difusión. Como vimos al inicio, estos canales pueden ser: SEO, redes sociales, email marketing y grupos privados, entre otros. Pero también podemos hablar del blog, podcast o Youtube, por ejemplo. En este sentido, cabe mencionar tanto el lugar donde se aloja el contenido como el canal por el que le vamos a dar difusión.

• Cuándo. Todo plan de contenidos debe establecer la fecha en que se va a compartir cada uno de los elementos que lo conforman. Basta con señalar la el día concreto.

• Cómo. El cómo está relacionado con el enfoque que se le quiera dar a cada contenido, así como con los temas a tratar dentro de él. Se recomienda añadir toda la información que se considere necesaria para elaborar cada contenido siguiendo las directrices del plan.

4) Acción: SEO, redes sociales y otras acciones

Tras crear el plan es el momento de pasar a la acción.  Es decir, toca hacer realidad el plan y para ello no se deben pasar por alto cuestiones como las siguientes:

• Creación. La acción más importante de todas es la creación o ejecución de cada pieza que hemos incluido en el plan. Sea artículo, vídeo, podcast, email o imagen, es necesario desarrollarla siguiendo las líneas que hemos marcado previamente. Solo así se ajustará a la estrategia y nos acercará a los objetivos que perseguimos.

• SEO. Todas aquellas piezas de contenido que sean susceptibles de SEO optimizar, deben contar con este componente. Por ejemplo, los artículos de blog o los vídeos que subimos a YouTube. Ambos permiten el posicionamiento en buscadores de sus contenidos, por lo tanto es fundamental aplicar técnicas que vayan en esta dirección.

• Difusión. Este punto puede llevarse a cabo por redes sociales o email marketing, principalmente. Con ellos, conseguimos llevar nuestros contenidos hacia el buyer persona adecuado. Esto también puede hacerse por medios de pago, pero en este caso hablamos solo de medios orgánicos o naturales.

5) Medición: Resultados de la estrategia de contenidos

Para cerrar las etapas de creación de una estrategia de contenidos, es fundamental hablar de la medición de resultados. Pues el único modo de saber si la estrategia está funcionando, es tomando métricas y analizando los datos que obtengamos. Pero…¿qué métricas son las más relevantes? Vamos a verlas:

• ROI.  Esta es una de las métricas más importantes de todas. Nos informa sobre la rentabilidad de la inversión que hemos realizado en cada etapa de la estrategia de contenidos. Lo ideal es que sea positivo y lo más elevado posible. Si no es así, habrá que realizar determinados ajustes hasta lograr mejores datos.

• Tráfico.  Cuando hablamos de tráfico en el contexto de las técnicas de estrategias de contenidos, nos estamos refiriendo a las visitas que recibe una web derivadas de los mismos. Por ejemplo, del posicionamiento de un post del blog en buscadores, de un email, un mensaje, una publicación en redes sociales o una mención en algún otro site. Google Analytics te ayudará a saber de dónde viene el tráfico que has adquirido y, así, podrás usar dicha información para optimizar tu estrategia.

• Engagement. Otra de las métricas que nos pueden ayudar a analizar el éxito de una estrategia de contenidos es el engagement. Este está ligado a la conexión que puedan generar los usuarios con una marca a través de los contenidos. En las redes sociales, a través de los comentarios, es muy fácil medir. También es posible hacerlo en plataformas que estén abiertas a la comunicación.

• Posicionamiento SEO. A pesar de ser una métrica de las más relevantes, la he dejado para el final. Y es que sin un buen posicionamiento SEO, muchas de las anteriores no existirían, tampoco sus beneficios. Para consultar estos datos, de nuevo te recomiendo acudir a las herramientas de Google, tales como Google Analytics y Search Console.

Con toda esta información, puedes volver a la etapa de planificación y ajustar tu estrategia de contenidos. Así sabrás dónde debes hacer mayor hincapié, qué aspectos se deben mejorar y qué acciones es mejor abandonar. De este modo, poco a poco te irás acercando hasta los objetivos marcados sin perder el rumbo.

¿Listo para comenzar tu estrategia de contenidos enfocada a objetivos? Recuerda que no sirve de nada crear por crear, sino que cada paso debe estar estratégicamente planificado.. Si sigues estos pasos, ¡alcanzarás tus objetivos!